Empresas y derechos humanos: avanzando en un camino sin retorno

Contenido aportado por Alboan, en el marco del grupo de trabajo por la Sostenibilidad

El pasado 10 de diciembre se celebró el Día Internacional de los Derechos Humanos, conmemorando el día en que la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, allá por 1948.

Desde entonces, son muchos los esfuerzos que se han realizado para garantizar su cumplimiento en todos los ámbitos. En el empresarial, algunos de los ejemplos más reconocidos a nivel internacional son los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre Empresas y Derechos Humanos o las Líneas Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales.

Desde la Unión Europea también se han producido importantes avances en este sentido. Recientemente, en mayo de 2020, la Comisión Europea anunció el desarrollo de una legislación histórica sobre derechos humanos y debida diligencia ambiental para las empresas europeas, que les afectará allá donde operen y en toda su cadena de valor.

En varios países de nuestro entorno, también se están produciendo movimientos en este sentido, con legislación aprobada ya en Francia, Alemania y Noruega, y procesos políticos en marcha en Holanda, Austria, Bélgica y Luxemburgo.

Se trata de un camino sin retorno y es importante que España y sus empresas no se queden atrás. Al igual que sucedió en su momento con el desarrollo de la legislación para la prevención de riesgos laborales, o con la normativa sobre gobierno corporativo y reporting en sostenibilidad, este avance representa una oportunidad de competitividad para aquellas empresas que estén preparadas para el cambio y se anticipen. La capacidad de adaptación distingue a las empresas y a las organizaciones del futuro.

En Alboan este año hemos celebrado nuestro 25 aniversario. 25 años trabajando junto a  miles de personas y cientos de organizaciones de todo tipo, para construir un mundo más justo. A lo largo de estos años hemos sido testigos de múltiples injusticias y violaciones de derechos humanos. Pero también hemos podido comprobar que son muchas las personas y las empresas que quieren ayudar a mejorar las cosas. En estos años hemos tenido la oportunidad de colaborar con más de 30 empresas navarras y queremos seguir haciéndolo durante muchos años más. Entre otras vías, participando en la “Alianza ODS por la Sostenibilidad Empresarial” junto a CEN, 3 ONG más y 9 empresas de Navarra.

También ponemos a disposición de todas las empresas que estén interesadas, la información y los materiales que se va generando en el marco de nuestra participación en espacios como la Plataforma por Empresas Responsables, que impulsa la adopción en España de una ley de diligencia debida en materia de derechos humanos y medioambientales, o CIDSE, la red internacional de organizaciones católicas de justicia social, que recientemente ha publicado un glosario para ayudar a comprender a qué nos referimos cuando hablamos de términos como diligencia debida.

Todo ello con el objetivo de enriquecer los avances que ya se están produciendo en Navarra con el impulso institucional, tanto en el marco de los ODS y la Agenda 2030, como de otras iniciativas como InnovaRSE y la reciente Estrategia de Especialización Inteligente (S3 Navarra) y sus principios rectores, o el trabajo que se pueda hacer en el marco del Plan Internacional de Navarra.

Como indicábamos más arriba, se trata de un camino en el que no hay vuelta atrás. Y Navarra y sus empresas tienen una gran oportunidad de adelantarse y prepararse para los cambios que vienen, destacando como un territorio de referencia a nivel global, competitivo, innovador, sostenible y solidario, que demuestra que se preocupa por garantizar el cumplimiento de los derechos humanos para todas las personas.